Seguidores

Entradas populares

lunes, 2 de septiembre de 2013

Verano y..... Camping

Bueno, llevo un verano de escándalo. Llevo todo el verano en Ejea de los Caballeros, en Aragón. En un pequeño camping llamado El Bolaso. La gente puede preguntar ¿Qué hay de encanto en un camping, en medio de la nada en el que para mucha gente sólo hay moscas y mosquitos? Pues para esa gente nada. Pero bueno. Para gustos, colores.

Cuando hablo a mis amigos de mi camping me preguntan: ¿Y tendrá playa no? ¿Piscina con tobogán? ¿No te aburres tu allí sin salir con la gente de aquí? Y yo les contesto: No. No Y... No. La gente cree que si no tiene playa o una piscina espectacular no es nada mas que un trozo de campo en el que no se puede hacer nada.

Pues veréis, El Bolaso, es un complejo turístico. Tiene un lago precioso, rodeado de árboles. Un restaurante y un bar, en el que se celebran bodas, bautizos, comuniones... También viene mucha gente a pasar el día. Tiene una piscina, no es estas piscinas espectaculares, no señor. Es sencilla. El suelo liso, sin azulejos. Sólo mide 1' 40 de máximo. Tiene una pista para jugar a tenis y otra para jugar a frontón. Está todo lleno de árboles, y, nada más por estar allí ya te refrescas, puesto que hay una brisa constante. El agua nunca está muy caliente. Suele estar más bien fría.

Y, por último, pero no menos importante, dejando atrás la piscina, el lago y el restaurante, se encuentra el camping. No es muy grande pero tampoco pequeño. Sus dueños, Rafa y los demás, se afanan en la tarea que es cuidarlo y limpiarlo día a día. La verdad, es que cuidan ese camping con mucho cariño y nunca ves los baños sucios. Te puedes encontrar a Rosa recogiendo papeles cada dos por tres y a Ricardo barriendo y limpiando cristales.

Es un camping sencillo, en el que te puedes encontrar a ``los fijos´´.  Los fijos, como así los llamamos, son la gente que ha dejado allí su caravana y a montado su avance para quedarse. Todos los viernes acuden al camping y se marchan los domingos. También hay fijos que, en vez de caravana, tienen un Mobile- Home. Yo tengo uno. Es como un piso pequeño, pero acogedor.

Yo siempre he dicho que El Bolaso, es como un pequeño pueblo. Yo he dividido el camping en dos partes: La parte alta que es donde están los bungalows y los baños y duchas. Allí hay algunas caravanas y a partir de una mini-rotonda que hay es la parte baja. También es lo que yo llamo la ``zona residencial´´ puesto que ahí están la mayor parte de los fijos y todos los Mobile- Home puestos.

A los niños nos gusta andar en bicicleta, lo que es muy fácil por el camping es como un ``escalestri´´ en tamaño real. Damos vueltas al lago, jugamos al escondite alrededor del salón social (un lugar con mesas, algunos juegos de mesa, un futbolín y también la única zona wifi del camping.), jugamos a ``polis y cacos´´ por la noche,vamos al parque, etc. Así que ahí el que se aburre es porque quiere. Los adultos tienen sus amistades y quedan para comer, van a casa de unos o de otros a tomar café...

Es un camping fenomenal. Todo el mundo está con todo el mundo. He de reconocer, que yo no soy de las personas más sociables del camping. No suelo salir demasiado de mi parcela. Pero no me importa lo más mínimo. Yo soy feliz leyendo o yendo a pescar. Hay a gente que le parece extraño que con 14 años, no quiera salir demasiado. Pero si soy así soy así ¿Qué se le va a hacer?

Este verano me lo he pasado muy bien. He disfrutado como una enana. He aprendido a pescar mucho mejor que el año pasado. Me han regalado dos cañas nuevas geniales y he encontrado en la pesca tranquilidad y aunque resulte extraño emoción. Me hace mucha ilusión cuando hunden mi corcho y sé que probablemente saque un pez. Me divierte y a la vez me cabrea cuando se me escapan. Y me llena de satisfacción cuando lo consigo. Para aquellos que me conozcan un poco, sabrán que mi gran afición es la lectura. Me he pasado incontables horas leyendo ya sea en mi cuarto o en una de las tumbonas. Al final, por leer demasiado he acabado con dolor de cabeza. Pero no en vano. Adoro el camping. Desde que era muy pequeña.

Y ahora que ya se acaban las vacaciones... Pues me alegro también. He echado de menos a mis amigas y amigos de Pamplona y el instituto me reúne con ellos.

En resumen: Ha sido un verano fantástico.

1 comentario: