Seguidores

Entradas populares

lunes, 22 de diciembre de 2014

No te digo adiós, sino hasta pronto

Hoy, 22 de diciembre de 2014, la Parca se nos ha llevado a un amigo. No sé muy bien que decir, porque creo que nunca se sabe qué decir en estos casos, más aún cuando la noticia es muy reciente y se está rota de dolor, como estoy yo ahora mismo, con lágrimas en los ojos.

Javi, Chibuli, nunca llegué a conocerte personalmente, y mucho menos de lo que me habría gustado, pero no por ello me duele menos tu marcha. ¿Qué puedo decir de ti? Nada que aquellos que te conocieron no sepan ya. Sabías cómo atender a la gente en el momento preciso, cómo hacer reír. Ah, ¡Cuántas veces me he reído con tus comentarios! ¡Cómo me gustaban tus historias! Esas historias que pasarán a la eternidad por su peculiaridad. Por que eras alguien único, capaz de sacar una sonrisa a todo el mundo en los peores momentos.

Recuerdo que, después de una mala experiencia personal, tú le decías a mi madre que querías romperle las piernas, y más comentarios que me hacían reír a pesar de la situación. Que compartíamos el amor hacia los animales, que siempre me reía con las historias que contabas acerca de tus mascotas y que yo decía que yo también quería tener mi propio Zoo Chibuli. Mi ilusión al saber que puede que fuera a conocerte.
Algo que nunca he podido hacer y que, desgraciadamente nunca podré hacer. Nunca podré ver tu Zoo personal, no podré abrazarte ni conocer más historias. Porque hoy has viajado en moto hasta el Cielo, en un viaje de ida, pero no de vuelta.

Me consuela un poco saber que estarás allí esperándonos a todos tus amigos y familiares, con tu sonrisa en los labios con muchas nuevas historias que contar. Que te habrás encontrado con gente conocida y que estarás allí haciéndoles felices, tal y como lo hacías aquí.
Nunca morirás del todo, porque todos nosotros llevamos un trocito de ti con nosotros y porque creo que siempre vivirás en nuestras memorias y corazones.

No te voy a decir adiós, porque esto no creo que sea una despedida, sino un hasta pronto, porque estoy segura de que algún día nos conoceremos.

lunes, 15 de diciembre de 2014

Un desahogo

Esta entrada no es como las demás, no trata de una historia si no de una vida, de mi vida en estos momentos. Estoy atravesando una muy mala época en la que estoy llena de sombras y sin nada de luz. Probablemente no tenga mucho sentido, pero esto surge desde mi cabeza, soltando muchas cosas que hace tiempo que llevo dentro y la voy a soltar tal cual, como un torbellino que es. Intentaré organizarlo lo máximo posible, perdonad si es un desastre, pero como digo no es un relato, si no pensamientos plasmados en papel.

Hay muchos momentos en los que desearíamos poder explotar y empezar de cero, poder desahogarnos con alguien de máxima confianza. Pero no existe alguien de máxima confianza, ya sea por unos motivos u otros.
Sé que la vida es dura, y que es lo que hay, que sólo queda tirar hacia delante y punto, que esta vida te va a pegar muchos golpes. Todos esos golpes que duelen y más. Y que lo mejor, como suele decir un gran amigo mío es reírse frente a esos golpes pero... ¿Cómo reír de los golpes más duros y fuertes? ¿De esos que son capaces de dejarte sin respiración? Yo no veo la manera.
También sé que siempre va ha haber gente peor que yo, en peor situación. Pero yo siempre digo que cada persona es un mundo, Dentro de cada persona, hay un mundo y no puedes decirle que en otro mundo (otra persona) están ocurriendo cosas peores, porque cada persona se va ha hacer cargo de su mundo y que este no se desmorone. Puede que suene egoísta pero es así. Para cada persona sus problemas van a ser los peores del mundo.
Estoy mencionando los tópicos que usa la gente de normal para consolar a otra persona, cuando ni siquiera saben qué les ocurre. Otro es el de: Ya vendrán tiempos mejores... Pero luego hay gente que dice que no hay que preocuparse por el futuro, que es mejor vivir el presente. Sea como sea, puede que vengan mejores tiempos, pero eso no importa, porque en el momento puede que estés viviendo un infierno.

Estoy en cuarto de ESO, el último año de secundaria. Puede que este sea el año más importante que haya en todos los estudios. Muchos pensarán; La universidad es más importante, el bachillerato... Sí, puede que sí, pero no puedes acceder a ninguno sin el título de la ESO que nos dan este año. Estoy en cuarto científico, porque me apasiona la Biología, concretamente, la Paleontología. Por eso decidí irme por esta rama. Pero tengo un pequeño problema: Nunca se me han dado bien las matemáticas, fundamentales este curso.
Este ahora mismo, es el menor de mis problemas. Tengo varios problemas personales que no puede contar por aquí.  Pero si a esos problemas que ya bastante impacto causan, les añades el instituto, la presión y otras muchas cosas, te sale como resultado mi estado de ánimo.

Creo que nunca antes había estado en una situación semejante, y, la verdad, no sé cómo he de actuar. No sé qué es lo mejor. Quiero lo mejor para todos, intentar ayudar, hacer algo. Luego veo que no hay nada o no se me ocurre nada más que intentar y me frustro. O que hay cosas que escapan a todo control humano.
Me parece muy injusto que gente que me rodea y a la que quiero tenga que pasar por todo lo que pasa, y que aún así, sigan luchando con toda su fuerza. Creo que son admirables, y me gustaría tener también su fuerza.

Sé que tal vez sea muy infantil por mi parte, pero, aún me pregunto, ¿Por qué ellos? ¿Por qué tiene que pasar todo esto? Imagino que me gustaría tener un mundo de color rosa y poder expulsar todos mis demonios, pero ¿A quién no le gustaría tener eso? Lo peor de todo es que, te paras a pensar, en todo aquello que te sucede, en analizar lo que te rodea y sientes que te ahogas, y que una piedra sube a tu garganta, impidiéndote hablar, impidiéndote respirar.
Creo que es una de las peores sensaciones que hay, esas ganas de gritar, llorar y patalear y tener que retenerlas, guardártelas todas hacia dentro. Todos esos problemas, guardártelos hacia dentro, y callar, mantenerte callado.
En mi caso, te mantienes callado para no hacer daño a aquellos que más quieres, para intentar no empeorar aún más la situación. Así que, sólo queda guardar silencio.


Bueno, eso ha sido todo, muchas gracias aquellos que me lean, esto sólo ha sido un pequeño desahogo, que de vez en cuando se necesita, lamento si está desordenado o no tiene sentido pero es así, tan solo surge de mi cabeza y lo voy escribiendo.